Muchas personas viven con un problema que afecta por completo su calidad de vida: no poder conciliar el sueño o dormir de forma interrumpida. El calor, el estrés o directamente sufrir insomnio hacen que algunas personas teman irse a la cama porque saben que lo más probable es que no puedan conciliar el sueño. Esto afecta directamente a la salud provocando irritabilidad, ansiedad, estrés, hipertensión y agotamiento. Pero no solo eso, también afecta a nuestra salud auditiva como consecuencia del cansancio mental general.
Adentrándonos en patologías más específicas, diversos estudios han descubierto que uno de los trastornos del sueño que más afecta a la calidad de nuestra audición es la apnea del sueño . Las personas que la padecen emiten una o varias pausas en la respiración mientras duermen, lo que deriva en problemas de diabetes o enfermedades cardiovasculares. Pero aquí también se ha establecido un vínculo muy directo que relaciona estos problemas de circulación sanguínea con el daño auditivo. Una disminución del flujo sanguíneo implica una reducción de los nutrientes que llegan al oído y esto puede resultar en el deterioro o destrucción de las células ciliadas auditivas.
Pero en sentido contrario, también existe una relación entre los trastornos auditivos y la capacidad para conciliar el sueño, es decir, existen patologías auditivas previas que conducen a una incapacidad para dormir cómodamente. El tinnitus , por ejemplo, es uno de los problemas que impiden la conciliación del sueño. Y no es de extrañar, ya que si los padecemos significa que tenemos nuestros oídos expuestos a continuos pitidos y zumbidos que alteran nuestra calidad de vida de innumerables formas.
Ahora hay marcas de audífonos que están trabajando en soluciones para personas con problemas de sueño relacionados con la audición. Por ejemplo, hablamos de almohadas con sonido , es decir, una almohada con altavoces estéreo integrados en su interior para escuchar un sonido agradable mientras dormimos y dejar de lado los irritantes zumbidos que provocan los acúfenos. Otra versión de este sistema es un pequeño altavoz que podemos colocar debajo de nuestra almohada y que cumple exactamente la misma función.