Dos de cada tres adolescentes de entre 8 y 16 años pasan más de dos horas al día jugando videojuegos. La palabra "gamer" ya es habitual en nuestro vocabulario y se utiliza para denominar a aquellas personas que sienten pasión por el mundo de los videojuegos. Estos jóvenes, hombres y mujeres, pasan horas frente a la pantalla acompañados de cascos , preferentemente muy potentes, que les permiten adentrarse de lleno en el universo del juego, experimentarlo de la forma más real posible y escapar de su entorno físico.
¿Dónde está el problema?
Al igual que cuando hablamos de escuchar música, el consumo de videojuegos durante largos periodos de tiempo y el uso de auriculares puede resultar muy perjudicial para la audición de los usuarios. Principalmente porque es habitual usarlos durante más de 60 minutos y a niveles superiores a los 60 db. Además, a esas edades los oídos son muy susceptibles y la exposición a ruidos nocivos puede causar problemas en el futuro.
El problema del daño auditivo en los jóvenes está cada vez más a la orden del día, por lo que las empresas de videojuegos ya han empezado a tomar conciencia de este problema e incluso están iniciando campañas para sensibilizar a los jóvenes sobre este tema. Según la OMS, más de 1.100 millones de hombres y mujeres jóvenes corren peligro de sufrir algún tipo de sordera asociada a los videojuegos. Incluso se dice que la generación millennial puede ser una de las más sordas de la historia si no se modifican los patrones de comportamiento. En relación a esto, la OMS señala que los que ahora tienen 20 años, cuando tengan 40 oirán lo mismo que los que ahora tienen 65.
¿Qué enfermedades puede provocar el uso continuado de cascos mientras se consumen videojuegos?
El principal peligro es sufrir una pérdida auditiva, media o severa, en la edad adulta, algo complejo de revertir. Además, es posible sufrir acúfenos, pitidos y zumbidos que no se deben a ningún estímulo externo, distorsiones auditivas o hiperacusia (sensibilidad a sonidos fuertes o determinados ruidos).
¿Cómo podemos cuidar nuestra audición si somos habituales de los videojuegos?
Si una persona está acostumbrada a tocar a un volumen muy alto, no puede reducirlo drásticamente porque no podrá, esta reducción tendrá que hacerse de forma paulatina hasta llegar a un nivel de decibelios seguro.
Otra forma de aliviar la exposición al ruido es tomar descansos periódicos para limitar el tiempo de exposición y dar tiempo a las células ciliadas para que se recuperen.