Cuando nos preparamos para construir una casa o adquirir cualquier inmueble hay muchas cosas que, por inexperiencia, pasamos por alto. Uno de ellos es la acústica de la que será nuestra casa. Si no elegimos los materiales y los espacios con un cierto criterio, nos encontraremos con una fuerte presencia de reverberaciones y ecos que harán que las estancias dejen de ser acogedoras. Esto hará que los ruidos ambientales se mezclen entre sí, dificultando que las conversaciones se desarrollen adecuadamente.
A continuación te daremos algunos consejos para que lo tengas en cuenta y puedas mejorar el confort acústico de tus viviendas actuales.
Cómo acondicionar acústicamente tu hogar
Para conseguir una mejor acústica en tu hogar bastará con adquirir los materiales adecuados, no hace falta que sean precisamente materiales acústicos, pero sí con materiales con los que estemos acostumbrados a convivir en el día a día.
La acústica de los espacios.
Para conseguir una buena accesibilidad auditiva hay que tener en cuenta la distribución de los espacios. Para las personas con problemas de audición es fundamental poder leer los labios de los interlocutores sin que ningún elemento se interponga. Hay que jugar con el mobiliario y con los espacios amplios para garantizar el contacto visual en todo momento.
Del mismo modo, la luz será fundamental para garantizar una buena comunicación. Esto, ya sea natural o artificial, tiene que ser suficiente para que las personas puedan verse bien. Además, debemos evitar la incidencia de la luz sobre superficies brillantes ya que la reflejarán intensamente y pueden cegar la visión.
Acondicionamiento acústico
Uno de los problemas más comunes en espacios acústicamente mal acondicionados es la reverberación. Esto sucede cuando los ruidos golpean superficies lisas y rebotan en ellas (paredes, techo, suelo...). Para corregir este problema tendremos que optar por el uso de materiales absorbentes tanto en la construcción como en el mobiliario y elementos decorativos. Aquí hay unos ejemplos:
- Elige materiales suaves que absorban el ruido: sofás, camas, cojines...
- Pon alfombras en el piso o en las paredes.
- Las cortinas que elijamos, cuanto más gruesas mejor.
- Dentro de la decoración sería muy conveniente optar por texturas.
- Las plantas son un excelente difusor acústico y además reducen el estrés y ofrecen bienestar emocional.
- Cuadros mejor sin cristal: Un cuadro al óleo, por ejemplo, reduce mucho mejor las ondas sonoras que cualquier cuadro protegido con cristal.